- QBP Erik Mendoza Sedeño
El
laboratorio clínico desde el inicio de su existencia ha sido trascendental en
la toma de decisiones médicas, sus aportaciones van más allá de sólo un
resultado, va acompañado de todo un servicio que los especialistas del
laboratorio saben, aplican e interpretan diariamente en las diferentes
muestras de pacientes patológicas y no patológicas.
En
este momento tan importante de contingencia por SARS CoV-2, nuevamente el
laboratorio se vuelve trascendental con las diferentes formas en las que
aporta resultados confiables a través de nuevas tecnologías y procesos
innovadores.
 Para que todo esto sea funcional, se requiere integrar
como un único sistema al laboratorio clínico, las personas que ahí trabajan y
las nuevas tecnologías. Lo cual lleva a incertidumbre en los grupos de
trabajo si no se cuenta con buen liderazgo y actitud para afrontar retos tan
grandes como este.
Y
es que el número de casos (1) es cada vez mayor (ver imagen) y entre más
preparados estemos, el apoyo brindado al sistema de salud será más
contundente. Como profesionales de la salud sabemos que el riesgo es alto,
pero por eso debemos cuidarnos siguiendo todos los protocolos de bioseguridad
disponibles como los de la Organización Mundial de la Salud (2)
Con
tanta información que el laboratorio genera en cada una de las pruebas
realizadas, se va generando la experiencia para el manejo de protocolos de
esta índole y como el virus SARS CoV-2 llego para quedarse, el laboratorio
requerirá toda esta experiencia para seguir aportando tan valiosa
información.
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